Ganador de varios premios en su trayectoria como el Impac 2010, el Llibreter o el Independent Foreign Fiction Prize 2013, el neerlandés ha explicado hoy, en el marco de la Semana del Libro en Catalán, que esta novela es la primera que escribió, hace 15 años.
Ahora llega traducida al castellano y al catalán de la mano de Rayo Verde/Raig Verd, después de la buena acogida de otras dos obras suyas, Todo está tranquilo arriba y Diez ocas blancas, traducidas a una veintena de idiomas.
La primera versión de esta novela de Bakker, que también ejerce de jardinero e instructor de patinaje sobre hielo, estaba muy pensada para un público de jóvenes lectores, pero, luego, la reescribió para que fuera legible para todos los públicos.
En este punto, ha aseverado que, cuando escribe para niños y jóvenes, es «como si lo hiciera de rodillas, contando las cosas de forma muy clara, mientras que para el público adulto hay cosas que no hace falta explicar».
En Los perales tienen la flor blanca, los protagonistas son tres hermanos, a los que les cambia la vida el día en el que uno de ellos pierde la vista tras sufrir un accidente en el coche familiar.